¡¡¡¡Hola de nuevo a tod@s!!!!
Y bueno, el examen, aparte de empezar el domingo pasado levantándome a las seis y media de la mañana e inaugurando oficialmente el cambio de hora con mi atontamiento... y haber pasado un frío de narices... no me salió mal del todo. Aclaro algo: No apruebo, pero al menos me ha servido de "ensayo general" para el siguiente al que me quiero presentar en unos meses. Voy a intentar que se cumpla el dicho de que "quien lo sigue lo consigue".
Quiero agradecer en este post dos premios que me encontré a la vuelta, muchas gracias AMIGOS ÁNGELES y MAESE RAPOSO, los recibo con toda la ilusión del mundo. NO LOS MEREZCO, ¡PERO SON UN MARAVILLOSO REGALO!

Quiero pediros disculpas por el retraso, pero apenas si he dormido esta semana, y es que me han pasado algunas cosas, por suerte todas buenas, y sobre todo una muy especial, que ha hecho resucitar a mi corazón de la pena en la que estaba.
Hoy os visitaré y os dejaré muchos besos, aunque eso no compensa que me haya escapado una semanita, pero creedme cuando os digo que casi no he tenido ni tiempo de respirar.
¡Un abrazo enorme para tod@s! y espero que estéis teniendo un buen fin de semana! :-)

























Al día siguiente, salió en su búsqueda. No le fué muy difícil dar con él. A partir de entonces, todas las tardes se veían. El trato llevó al enamoramiento mutuo. Al principio, creían que su relación permanecía a salvo de dimes y diretes, pero pronto llegó a oídos del Señor de San Paio la amistad de su hija con un plebeyo, y estalló en un ataque de furia que derivó en la orden de apresar al aldeano que se había atrevido a acercarse a su hija.



